Toda casa tiene goteras. Atmósfera de humedad. Instalación audiovisual. Por Adriana Bravo- Georgina Santos
Ni infierno ni paraíso, lo tropical de vegetación densa y humedad absoluta, se construye en esta obra desde la hamaca; espacio para la pereza y el erotismo, que resulta del encuentro entre el cuerpo y el calor tropical.
Pieza de video instalación sonora, como encomienda para la XXI Bienal Internacional de Arte, Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, que parte de la figuración y simbolismo. El video nos muestra primeros planos de un contacto táctil con unas naturalezas que se vuelven intimas, explícitamente vaginales, que denotan esa libido, energía psíquica feminista, expresión de sensualidad y sexualidad, al suspenso de la respiración para evadirse, escuchando relatar la interioridad de aquellas que hablan desde sus vaginas.
Es una obra que se construye con dispositivos que te ayudan en esta ficción, que la activan y la encienden como una analogía de presencia física, luz roja que nos traslada a la estética de los moteles de carretera.
Matecha Rojas, Curadora
Neither hell nor paradise, the tropical with dense vegetation and absolute humidity, is built in this work from the hammock; space for laziness and eroticism, which results from the encounter between the body and the tropical heat.
Piece of video sound installation, as an assignment for the XXI International Biennial of Art, Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, which starts from figuration and symbolism. The video shows us close-ups of a tactile contact with some natures that become intimate, explicitly vaginal, that denote that libido, feminist psychic energy, expression of sensuality and sexuality, to the suspense of the breath to escape, listening to relate the interiority of those that speak from their vaginas.
It is a work that is built with devices that help you in this fiction, that activate and turn it on as an analogy of physical presence, a red light that takes us to the aesthetics of roadside motels.
Matecha Rojas, Curator
Vaginas del Gran Poder
Propuesta de bordado y aplicaciones que se deriva de técnicas tradicionales andinas para la elaboración de trajes religiosos y danzas populares como la morenada, diablada y caporal.
Esta propuesta está íntimamente ligada al Taqui onqoy, que es remitido por María Rostworowski como un movimiento indígena que se dio a fines de 1500 y cuyo objetivo era sublevarse ante la imposición religiosa católica mediante el baile y el canto, éstos como actos de resistencia cultural.
Taqui onqoy se traduce del quechua como enfermedad del canto y baile, y refiere al momento en que los pobladores originarios fueron poseídos por las huacas, es decir por las deidades antiguas, principalmente el Titicaca y Pachacamac. Los indígenas al ser poseidos entraban en una especie de trance donde corrían y cantaban practicando actos ilícitos en respuesta a la imposición de la religión judeocristiana. La derrota de los tres líderes del movimiento, la extirpación de idolatrías y la condena pública de quien lo practicaba, contribuyeron al cese de este levantamiento, sin embargo logró sobrevivir mezclado en el folklor cotidiano de relatos, danzas y música andina.
Para Varinia Oros Rodríguez, Antropóloga y Curadora del Museo Nacional de Etnografía y Folklor, Bolivia, los trajes de la celebración del Gran Poder son Huacas, por ende son ch´allados antes de usarse para que el bailarín tenga buena suerte y no se canse en la entrada dancística. Esta ch´alla, además de lo mencionado, tiene la función de ser una libación ritual para llamar a alguna deidad y convertir al bailarín en un recipiente para la posesión, recordando de este modo lo sucedido en el Taqui Onqoy.
Las deidades o Huacas tienen la capacidad de ser móviles, etéreas y juegan con el espacio y tiempo, a la vez tienen varias advocaciones, entre ellas las kamasas o animales de poder. Estos usualmente están presentes iconográficamente en las máscaras y bordados de los trajes, cuyos portadores refieren que cuando bailan se sienten otros. Posiblemente se trate de una especie de trance que los despoja de su natural condición humana mientras se mueven envestidos en morenos, achachi morenos, chinas morenas, chinas supay, diablezas, diablos de tropa incluyendo ángeles, cóndores y osos.
Vaginas del gran poder propone ser una distorsión y acto doloso a la iconografía tradicional para incorporar lo femenino a través de la técnica del bordado aplicada en animales como cóndores, pumas, lagartijas, sapos y serpientes, que como se ha mencionado fungen como kamasas que ayudan a la canalización de deidades o entidades tutelares.
Perturbar esta iconografía es importante y necesario, debido a la edición histórica y social del papel de la mujer. Sentimos que la expresión visual de lo femenino y el tercer género fueron violentamente extirpados e intencionalmente encasillados en patrones binarios, dejando mutilada la posibilidad de innumerables estancias genéricas de una misma deidad, kamasa o ser vivo.
Para hacer un mayor énfasis proponemos la reincorporación cruda y vívida de elementos femeninos, dando un especial acento a la parte femenina que ha sido borrada, relegada y encubierta por el poder patriarcal: la vulva.
Este poder y control sobre el cuerpo, y lo que conlleva como deseo y placer, se ha instaurado más enérgicamente después de la conquista, en pos de explotar y conquistar el cuerpo de los habitantes y así imponerse sobre las relaciones sociales y el territorio.
Del mismo modo, es importante pensarlo desde el textil por ser una técnica que ha sabido resguardar símbolos y modos de hacer antiquísimos dentro del alma del hilo. Desde generar el filamento hasta pensar la trama y la urdimbre. En este caso, desde dibujar las distintas capas que contendrán hilos metálicos. Capas que se llenan de colores y brillos que configurarán el dibujo. Igualmente nos interesa trabajar desde el textil como eje conceptual, al ser considerado una labor femenina que hasta hace pocos años, no era reconocida como trabajo, y por ende no suponía pago ni valor.
Como propuesta conceptual, nos es importante hacerlo nosotras mismas. Es decir, desde el bocetaje hasta la elaboración artesanal de cada composición. Esto debido al sesgo colonial de relegar las tareas manuales a otros, imponiendo un cierto poder de mando y dividiendo las tareas intelectuales de las manuales.
Vaginas of Great Power
Proposal for embroidery and applications that is derived from traditional Andean techniques for the elaboration of religious costumes and popular dances such as the morenada, diablada and caporal.
This proposal is closely linked to the Taqui onqoy, which is referred by María Rostworowski as an indigenous movement that took place at the end of 1500 and whose objective was to rise up against the Catholic religious imposition through dance and song, these as acts of cultural resistance.
Taqui onqoy is translated from Quechua as a disease of song and dance, and refers to the moment in which the original settlers were possessed by the huacas, that is, by the ancient deities, mainly Titicaca and Pachacamac. When the natives were possessed, they entered a kind of trance where they ran and sang practicing illicit acts in response to the imposition of the Judeo-Christian religion. The defeat of the three leaders of the movement, the extirpation of idolatries and the public condemnation of those who practiced it, contributed to the cessation of this uprising, however it managed to survive mixed in the daily folklore of stories, dances and Andean music.
For Varinia Oros Rodríguez, Anthropologist and Curator of the National Museum of Ethnography and Folklor, Bolivia, the costumes for the celebration of the Great Power are Huacas, therefore they are ch'allado before being used so that the dancer has good luck and does not tire in the dance entrance. This ch'alla, in addition to the aforementioned, has the function of being a ritual libation to call some deity and turn the dancer into a container for possession, thus recalling what happened in the Taqui Onqoy.
The deities or Huacas have the ability to be mobile, ethereal and play with space and time, at the same time they have various invocations, including kamasas or power animals. These are usually present iconographically in the masks and embroidery of the costumes, whose wearers refer that when they dance they feel others. Possibly it is a kind of trance that strips them of their natural human condition as they move around dressed in brunettes, brown achachi, brunette Chinese, supay Chinese, devils, devils of troops including angels, condors and bears.
Vaginas of great power proposes to be a distortion and malicious act to the traditional iconography to incorporate the feminine through the embroidery technique applied to animals such as condors, pumas, lizards, toads and snakes, which as mentioned act as kamasas that help to the channeling of deities or tutelary entities.
Disturbing this iconography is important and necessary, due to the historical and social edition of the role of women. We feel that the visual expression of the feminine and the third gender were violently extirpated and intentionally pigeonholed into binary patterns, leaving the possibility of innumerable generic estates of the same deity, kamasa or living being mutilated.
To make a greater emphasis we propose the crude and vivid reincorporation of feminine elements, giving a special accent to the feminine part that has been erased, relegated and concealed by the patriarchal power: the vulva.
This power and control over the body, and what it entails as desire and pleasure, has been established more energetically after the conquest, in order to exploit and conquer the body of the inhabitants and thus impose on social relations and the territory.
In the same way, it is important to think about it from the textile as it is a technique that has been able to protect ancient symbols and ways of making within the soul of the thread. From generating the filament to thinking about the weft and warp. In this case, from drawing the different layers that will contain metallic threads. Layers that are filled with colors and brightness that will configure the drawing. We are also interested in working from the textile as a conceptual axis, as it is considered a feminine work that until a few years ago was not recognized as work, and therefore did not imply payment or value.
As a conceptual proposal, it is important for us to do it ourselves. That is, from the sketching to the artisanal elaboration of each composition. This is due to the colonial bias of relegating manual tasks to others, imposing a certain power of command and dividing the intellectual tasks from the manual ones.
Biografía
Adriana Bravo nace en La Paz, Bolivia, donde estudia Artes Plásticas. Para ampliar sus conocimientos viaja a la Ciudad de México a estudiar la Maestría en Artes con especialidad en gráfica en la Universidad Nacional Autónoma de México, UNAM. Su investigación y creación la hace quedarse en México por más de 15 años, donde adquiere la nacionalidad. Por cuestiones profesionales regresa a La Paz, donde sigue produciendo desde la gráfica, los audiovisuales y el arte contemporáneo.
Georgina Santos, mexicana llega a a Bolivia en el 2016 por una estancia de investigación de la UNAM con la Maestría en Artes. Una de las principales razones para venir fue el textil: las técnicas, la organización de grupos, el uso en las comunidades y en el arte contemporáneo. Ambas artistas se encuentran y deciden trabajar en algunos proyectos juntas. El primero, en la 10 Bienal de Arte, SIART, en donde en conjunto con el Laboratorio textil ganan el premio de adquisición de obra con la pieza interactiva Mama Huaco. Posterior a esa experiencia trabajan en conjunto en obras textiles como las Vaginas del Gran Poder, algunos performances e instalaciones interactivas.
Para conocer más su trabajo pueden visitar sus redes sociales: @yinasnts / georginasantos.blogspot.com @aceitunabrava / https://www.facebook.com/adriana.bravo.nano
Biography
Adriana Bravo was born in La Paz, Bolivia, where she studied Plastic Arts. To broaden her knowledge, she traveled to Mexico City to study a Master of Arts with a specialty in graphics at the National Autonomous University of Mexico, UNAM. Her research and creation makes her stay in Mexico for more than 15 years, where she acquires nationality. For professional reasons, she returned to La Paz, where she continues to produce from graphics, audiovisuals and contemporary art.
Georgina Santos, Mexican, arrived in Bolivia in 2016 for a research stay at UNAM with a Master of Arts. One of the main reasons for coming was textiles: techniques, group organization, use in communities and in contemporary art. Both artists meet and decide to work on some projects together. The first, at the 10th Art Biennial, SIART, where, together with the Textile Laboratory, they won the prize for the acquisition of work with the interactive piece Mama Huaco. After that experience, they work together on textile works such as Vaginas del Gran Poder, some performances and interactive installations.
To learn more about her work, you can visit her social networks: @yinasnts / georginasantos.blogspot.com @aceitunabrava / https://www.facebook.com/adriana.bravo.nano