Mujeres: transformaciones y cuerpos monstruosos
Curaduría: Adriana Briceño Boes, Dayana Gamboa Vargas y Valeria Zúñiga Brenes
Mujeres: Transformaciones y cuerpos monstruosos, plantea el arte de horror como un medio que expone la transformación corporal femenina, explora temáticas relacionadas al rol asignado a la mujer dentro de la sociedad y la manera en la que esta se autopercibe. Si bien el arte de horror puede cumplir una función de entretenimiento mórbido, este también es capaz de ser un espacio de exploración. Es un arte que no solamente es percibido desde lo negativo, la fatalidad y el miedo. Funciona como un medio para generar empoderamiento y empatía entre las mujeres ante sus circunstancias dentro de una sociedad que las degrada y violenta, y ante sus transformaciones corporales que son censuradas.
A través de las obras de 4 artistas mujeres de diversas partes del mundo, se pone en manifiesto una perspectiva y mirada femenina del arte de horror. Imágenes de mujeres transfiguradas y monstruosas, se apropian de mitos y leyendas que se adaptan dentro de un contexto contemporáneo, en donde ya no cumplen una función de enseñanza moral. Ahora, actúan como un rechazo al ideal de mujer, a la construcción y concepción que se tiene de ella en la sociedad patriarcal.
Agradecemos a las artistas: Peeg, Aleksandra, Olivia y Eimy por participar y hacer posible la exposición virtual.
Esta exposición fue realizada como parte del curso de Museología, II Ciclo Lectivo 2020. Impartido por la Dra. Lauran Bonilla-Merchav en la Escuela de Artes Plásticas de la Universidad de Costa Rica. Nuestro más profundo agradecimiento a la profesora por su disposición y asesoría a lo largo de este proceso.
Ver Enlace a la exposición original
Mitos y Leyendas
Contar historias es intrínseco de la humanidad, por lo que los mitos y leyendas han sido instrumentos que interrelacionan la lección moral y el entretenimiento, desdibujando los límites entre lo real y lo imaginario. La mujer ha tenido un papel primordial en estas narrativas, en donde es representada de dos maneras: o es un ser vulnerable, idealizado y de interés romántico; o es poderosa, impura y corrupta, fuente de contaminación moral y física.
El cuerpo femenino es también representado como algo monstruoso o benévolo, asociado a los ciclos naturales de su cuerpo que son percibidos como amenaza de poder, castigo y peligro. Ambas facetas se encuentran en constante tensión, la inocencia corre el peligro de perderse o está perdida.
Como en todo mito y toda leyenda, la interpretación que aquí hacen las artistas sobre la licantropía, el vampirismo, la brujería y las narraciones del folclor se transforma; así como se transforma el cuerpo de las mujeres.
La brujería ha sido una práctica condenada históricamente a raíz del desprecio hacia la mujer, sobre todo a la idea de que sea fuerte y conocedora. La bruja es vivo ejemplo de una mujer que se desempeña independientemente, lo que se percibe como una amenaza al orden de la sociedad patriarcal. Mujeres que se desarrollaron como parteras y curanderas fueron censuradas, castigadas y tachadas de brujas.
Esta pintura que realizó Eimy Navarro para la exhibición del colectivo feminista Chicas al Frente: Artivismo, abril 2019, busca según la artista “representar a la mujer como un ser vinculado a la naturaleza y la magia, segura de sí misma, como una forma de rebelarnos contra representaciones machistas, en las que estas características son motivo de vergüenza y desprecio.”
En esta obra la artista trata el tema del terror y el instinto animal, enfatizando como se ha representado a la mujer en el género de terror y el simbolismo de la licantropía como algo desenfrenado y deshumanizante. La sexualidad femenina y los cambios que vienen con la pubertad (como la aparición de vello corporal, púbico y el inicio del ciclo menstrual); han sido un tabú y percibidos como algo monstruoso. Las transformaciones a las que hacemos referencia se pueden asociar fácilmente a la licantropía, aún cuando esta se entiende de forma más masculina, siendo hombre lobo la denominación común para referirse a estas criaturas. Esto va de la mano con la aparente incredulidad de que una mujer puede ser un ser violento o peligroso a causa de las ideas preconcebidas hacia el género femenino, por lo que, la artista
buscó representar algo que nos haga preguntarnos:
"…¿quién es realmente la amenaza en la imagen?, ¿de quién es la sangre?, ¿quién decapitó al lobo?, ¿es ella víctima o perpetradora?”
Sirin de Aleksandra Czudzak realiza una exploración y reinterpretación de la mitología folklórica eslavica. La criatura sirin es un híbrido entre mujer y ave directamente basado en los mitos griegos y las leyendas de las sirenas. Eran criaturas encantadoras pero peligrosas, las cuales cantaban hermosas canciones sobre placeres futuros, mas quienes las escuchaban, olvidaban todo lo de este mundo para seguirlas. Luego, representaron armonía y su canto, buen augurio.
Mujer y Sociedad
La posición de la mujer en la sociedad occidental ha sido una de estándares inalcanzables y escrutinio constante. Su única función es de objeto, ya sea de admiración sexual o devoción maternal. Se encuentra balanceada en un pilar de atributos como belleza, gracia y pureza, cuya caída tiene como consecuencia el ser recriminada por sus miembros más cercanos y la sociedad en general. Se considera un ser emocional, mas las emociones externalizadas deben ser siempre positivas – cariño, paciencia, suavidad – y las emociones negativas deben ser reprimidas.
Cualquier comportamiento o manifestación contrario al ideal construido por la sociedad se mira como algo atroz y monstruoso. El derecho casi nulo de las mujeres a expresarse libremente hace de lo monstruoso un medio atractivo para desprenderse de su supuesta vulnerabilidad y de lo que la sociedad espera de ella.
Goodnight de Olivia Steen toca el tema de los estándares sociales impuestos a la mujer, que van desde mantenerse “pura” hasta ser “bella” físicamente. Entre los elementos de la obra, la aureola que aparece sobre la cabeza de la figura alude a una idea de pureza y santidad. La obra es una crítica hacia las ideas preestablecidas sobre el cuerpo femenino. Por ejemplo, la delgadez es considerada un atributo de belleza, que por presión de la sociedad muchas mujeres llevan a un extremo que atenta contra su bienestar. La mujer se concibe como un objeto de deseo para los hombres, mas hay una línea que ella no debe sobrepasar: el ser consciente de su atractivo y utilizarlo para sus propios intereses.
Mirror, mirror nos presenta una visión autorreflexiva de la mujer que cuestiona el precio de cumplir o intentar encajar en el ideal de belleza y feminidad. Steen resignifica la fotografía, a través de la intervención, y le da un carácter melancólico con el fantasma que se encuentra en un ambiente lleno de soledad y tristeza. Nos lleva a preguntarnos ¿quién es esa figura?, ¿cómo se siente?, ¿qué se cuestiona realmente?
Autopercepción
Tomar como fuente de inspiración, fuerza y desahogo muchas de las temáticas de horror que giran alrededor de lo femenino, es una práctica que muchas artistas han utilizado como recurso para expresar las emociones y sentimientos que atrapan constantemente a las mujeres. Las mujeres monstruosas son un desprendimiento de las expectativas sociales, una aceptación de las facetas negativas presentes en todas las personas. Es una forma de crear conciencia de sí mismas, pero también un espacio para reflexionar o generar apoyo y empatía entre las mujeres que desde su individualidad pueden identificarse o resonar en otras.
En esta obra, Czudzak aborda el tema del olvido y cómo lo que olvidamos nos inquieta y nos hace sentir desplazadas de la realidad. Además, explora el tema de la relación corporal que tiene la mujer con la naturaleza, con lo vegetal y con la tierra. Realiza una introspección, en donde mira y acepta sus espinas, sus partes más oscuras y dolorosas, que la llevan a florecer.
En la acuarela Octubre de Navarro, podemos asociar las características del mes lluvioso, con las emociones que puede experimentar una mujer. La tristeza, el cansancio, la insuficiencia y sobretodo la vulnerabilidad, son sentimientos que surgen como consecuencia de los ideales restrictivos con los que carga la mujer desde niña; además de la violencia creciente y desmedida de la cual es víctima. A pesar de esto, podemos ver un mensaje de esperanza, fortaleza y crecimiento, en las flores que nacen en el suelo y son regadas por la lluvia del cielo oscurecido.
Artistas
Peeg
Peeg (@peegpin) es una artista canadiense nacida en Ontario, que reside actualmente en el área metropolitana de Toronto. Su formación artística fue mayoritariamente autodidacta, sin embargo, fue parte de programas de arte en la escuela secundaria, con un plan de estudios de fundamentos de arte de nivel universitario. Además, Peeg fue parte de la carrera de ilustración durante 2 años en Sheridan College. Tiene un gran interés por la construcción de narrativas independientemente del medio, y el proceso de toma de decisiones creativas.. Finalmente, cabe resaltar que, durante gran parte de su niñez Peeg tuvo disgusto por las temáticas de horror. No obstante, al llegar a su adolescencia, el horror se volvió una manera de explorar sus ansiedades.
Aleksandra Czudżak
Aleksandra Czudżak (1994) es una artista especializada en ilustración y grabado oriunda de Wrocław, Polonia. Estudió en el Departamento de Gráfica de la Academia de Bellas Artes y Diseño de Eugeniusz Geppert en Wrocław y obtuvo su maestría en el año 2018. Su técnica preferida es el grabado a buril, y describe su trabajo como uno guiado por la intuición y las emociones. Czudżak utiliza motivos animales para representar aspectos buenos y malos de la naturaleza humana - emociones difíciles-; además de arquetipos, sueños, recuerdos y cuentos populares. En muchas de sus obras se pueden apreciar híbridos, que son hermosos y salvajes, o aterradores y embrujados, que reflejan el interés de la artistas por la dualidad y la simetría. Los híbridos de Czudżak son descritos como la intersección entre la naturaleza y el alma, y se manifiestan como un espacio seguro para explorar el tema de la transformación. Últimamente, la artista presenta un énfasis en explorar los diferentes aspectos de la feminidad.
Olivia Steen
Olivia Steen (1993) es una artista autodidacta basada en Londres, Inglaterra. Estudió modelismo en la universidad y trabajó como pintora y asistente de taller en Madame Tussauds en Londres. Sus intereses principales son las fotografías antiguas y la kitsch americana de los años 50. Steen incorpora dichos temas en su arte y crea imágenes de una cualidad inquietante, idealmente animando al espectador a encontrar su propio significado en la obra. El motivo de los fantasmas en 'sábanas' que aparece en su trabajo da anonimato a las figuras, permitiendo al espectador crear una narrativa por sí mismo.
Eimy Navarro
Eimy Navarro (1998) es una artista independiente costarricense, quien inició sus estudios en Diseño Plástico en la Universidad de Costa Rica en el año 2018. Desde muy joven se sintió motivada por la creación artística de su madre, quien en ese momento pintaba desnudos femeninos, siendo estos una primera gran influencia para la artista. Sus dibujos están fuertemente influenciados por la mitología clásica y la animación japonesa, y frecuentemente describen seres de fantasía humanoides con elementos de plantas o insectos. Para la artista, estos seres, representan diferentes facetas de sí misma, su sexualidad, sueños, ideas, miedos y criterios; los cuales están fuertemente ligado a sus vivencias, emociones y recuerdos.
Además de los dibujos, Navarro destaca por sus retratos, en línea con las influencias antes mencionadas, y su constante búsqueda de temas y medios para explorar. Sin embargo, la naturaleza y las emociones es un tema predominante que se mantiene a lo largo de su obra. La artista también se ve influenciada por corrientes feministas interseccionales, y ha desarrollado un interés por retratar cuerpos diversos que se oponen a las representaciones más convencionales del cuerpo femenino.